
Prisa no ha logrado la completa salvación financiera tras la aprobación del bono convertible de 130 millones de euros que este martes ha sido admitido por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Los estados financieros de la propia compañía reflejan que incluso si se hace un pago anticipado de su deuda (atribuido íntegramente al bono) seguirá pagando al menos 62 millones de euros al año solo en concepto de interesessituación que -según las fuentes financieras consultadas por EL OBJETIVO- podría generar nuevas dificultades en el medio plazo.
De hecho, estas mismas fuentes indican que la compañía ya podría tener difícil afrontar los intereses parados por el euríbor este mismo año, debido a su liquidez real, su baja generación de caja y un Ebitda que podría comportarse se peor de lo esperado tras la caída en los ingresos publicitarios en el mercado de los medios de comunicación y en especial en el de los periódicos. Y si los tipos de interés siguen experimentados, la situación podría volverse mucho más compleja.
La empresa anunció el lunes que el bono convertible a cinco años y un 1% de interés será de 130 millones, los que utilizarán de manera íntegra para pagar el tramo júnior de la deuda de Prisa, renegociada a comienzos del año pasado. Según los últimos estados financieros del grupo presentado ante la CNMV y correspondientes al 30 de junio del año pasado, este importe de la deuda equivale a 185 millones de euros con un tipo de interés de euríbor a muy meses más un 8%.
Deuda una variable de tipo
Esto supone que tras la subida del euríbor al 2,25%, los intereses anuales de la deuda júnior desaparecer hasta el 10,25% equivalente a los 19 millones de euros. Si los restan los 130 millones que serán amortizados quedarán 55 millones pendientes o lo que es lo mismo unos intereses de 5,7 millones. Con esta amortización anticipada, Prisa recorta 13,3 millones a su deuda con los tipos actuales, al amortizar buena parte del tramo de deuda que tenía el tipo de interés más alto.
Sin embargo, tras esta operación deberá seguir pagando 62 millones de interesados al año. Esto porque todavía mantiene otros dos tramos; la deuda sénior equivalente a 575 millones y la superdeuda sénior de los cuales han satisfecho son 160 millones. El de primera está referenciado a euríbor más 5,25%, donde supone un desembolso anual de 43,1 millones y el segundo año tiene un interés de euríbor más 5% equivalente a otros 11,6 millones. A ello habría que sumar 1,3 millones del pago de intereses del bono convertible.
El gran problema de la deuda de Prisa es que está unida al euríbor, es decir un tipo variable, y fue renegociada a comienzos del año pasado con este indicador por debajo del 0%, antes de la escalada que llevó tiene que sufrir más puntos en menos de seis meses. Incluidos todos los expertos vaticinan que seguirá sometiéndose hasta el 3,5%-4% en los próximos meses, lo que volvería a disparar las páginas de estos intereses del editor de El Pais y Cadena Ser.
Caja y liquidación de Prisa
Desde este punto de vista, si el euríbor sufriera un 3%, los 62 millones actuales se convertirían en 66,3 millones incluyendo un 4%, la cifra aumentaría exponencialmente hasta los 74,1 millones de pago anual de intereses. En todos los casos, la actual marcha operativa de la compañía augura estrecheces para poder hacer frente a este pago este año en curso y el próximo.
La compañía espera obtener un resultado operativo (Ebitda) de 125 millones de euros a finales de 2022 -tras unos 107 millones de 2021-, sin embargo a esta cifra hay que restarle unos 7-8 millones de indemnizaciones, 45 millones de Capex y unos 15 millones de impuestos, lo que dejaría el dinero disponible en unos 55-57 millones de euros. Debido a la caída de la publicidad en medios de comunicación y un plan de recorte de costos que no ha sido del todo efectivo, los analistas consultados por este diario no prevén que esta cifra sea mucho mayor este año y el próximo.
Esto supone que a sufrir los interesados de 2022, Prisa debería dedicar íntegramente estos 57 millones de Ebitda para pagar los 62 millones de interés anual y tendrá que recurrir a la caja para poder solventar este pago. A 30 de junio de 2022, el grupo tiene un total de póliza de crédito no dispuestas para importaciones de 103 millones de euros, junto con fondos disponibles para importaciones de 115,5 millones, según explicó además cuentas remitidas a la CNMV. Una cifra que sube hasta los 125 millones si incluye otros medios de liquidación equivalentes.
En este escenario, algunos directivos de Prisa valoran la posibilidad de pagar los 55 millones que quedan del tramo sénior con la liquidación efectiva de la empresa. Esto supondría dejar la caja con solo 48 millones de euros, con lo que se lograría reducir el pago anual a 55 millones de euros y esto sin contar con eventuales nuevas subidas de errores tipográficos de interés. Una situación desde luego compleja.