
El año pasado Elden Ring se colocó como el juego más deseado de todo Steam y su éxito fue arrollador. Ahora, su stituto en ese puesto en 2023 es Hogwarts Legacy y all podemos hacernos una idea de por que la adaption de la saga de J. K. Rowling apunta un pelotazo de los gordos.
el universo de harry potter son una de las más diversas y rentables que se pueden encontrar en la fantasía. Duendes, magicians, mandrágoras, hipogrifos… toda suerte de seres mágicos que pueblan un mundo hermoso para descubrir, aunque esconde un pasado la mar de oscuro. Las diferencias entre los que manejan la magia han sido constantes, pero sus similitudes con la realidad son más que evidentes.
Las dos caras de la moneda
Mientras esperamos a que el próximo 11 de febrero llegue, las migas de pan para alimentar la expectación van apareciendo. Una de ellas es la que ha presentado eSportsMAPFRE, desvelando que viviremos cierta situación dentro del juego; una rebelión de duendes en la que nuestro papel se enfrentará a quienes buscan “dejar de sufrir discriminacion por parte de magos y brujas“.
Es decir, no defenderemos a los represaliados, sino que el objetivo consistirá en acallar esas protestas por un trato más que justo. La comunidad volcó en contra de la publicación, poniendo en duda el valor de una tarea de este tipo, lo cual obligó a que el tweet desapareciese horas después. Con todo, no es la primera vez que Legado de Hogwarts nuestra pondrá en un contexto peliagudo.
Hace semanas pudimos saber que habrá acceso a una cámara donde podremos ejecutar algunas de las maldiciones imperdonables. Son hechizos con un poder dañino absoluto, sino mortal, y se podrán ejecutar para torturando a nuestros ex alumnos. Una barbaridad que habrá que ver en acción y que sirve como excusa para echar un vistazo al pasado del mundo mágico.
¿Quiénes son los personajes que se quejan de un trato discriminatorio? Los duendes, esos seres que hemos visto en todos los pasillos del banco de Gringotts, son los que creen que sus derechos son vulnerados. Mirando hacia atrás en la historia, porque se han cargado de muchas razones para afirmarlo.
Diestros en las finanzas y en la orfebrería, son conocidos por prácticamente dominan la economía mágica, lo cual les otorga un puesto imprescindible en la maquinaria de los magos y brujas. Siempre subordinados a los humanos, custodio de sus más valiosas pertenencias en las bóvedas, incluyendo todos los galeones, hoces y knuts.
Esto no les ha impedido ser apartados del uso de las varitas, pero ellos mismos se demostrarán capaces de realizar magia sin dicha herramienta. A primer paso en el resentimiento y creación de prejuicios por parte de los duendes hacia los magos. A todo ello hay que sumar la diferencia de valores, lo cual desencadena desencuentros entre especies.

Para un duende, cualquier objeto creado por ellos lo convierte en su propiedad, a pesar de que puedan venderlo. Es más, si el comprador muere, el objeto debe volver al duende que lo fabricó. Ellos creen que en realidad el pago está más relacionado con el concepto de alquiler que con el traspaso de la propiedad. Por tanto, el venta de la legendaria espada de Godric Griffyndor creado por el rey Ragnuk el Primero ha sido interpretado por los duendes como un robo histórico.
Aún más hay que añadir, ya que los duendes son especialmente quisquillosos con el pago de deudas. Guarde un enorme resentimiento si no recibe la cantidad que les corresponde y persiguen cual cobrador del frac a todo aquel que evite sus responsabilidades económicas para con ellos. ¿Qué tiene que ver esto con el mundo real? Bueno, para el cómico Jon Stewart, de origen judío, es una relación evidente.
No es oro todo lo que reluce
“Cuando vi una de esas cosas en la pantalla estaba esperando que todo el publico estuviese como ‘hostia puta, ella [Rowling] no creé un mundo mágico simplemente para colocar a judíos controlando un puñetero banco subterráneo‘. Y todo el mundo simplemente dijo ‘magos'”, señala en su podcast Stewart.
Es comprensible el vínculo que se genera entre la comunidad judía y la idiosincrasia que se dibuja sobre los duendes. Hay quien sostiene que hasta la publicidad más antisemita de la época nazi se atribuye como inspiración para dar forma a las criaturas mágicas. Es más, en las baldosas de Gringotts, durante Harry Potter y la piedra filosofal, podemos ver lo que se asemeja a una estrella de David en el suelo.
La escena a la que hace referencia Jon Stewart la compartí en 2018, cuando Rowling estaba difamando a la izquierda como antisemita y apenas comenzaba a abrazar sus infames puntos de vista antitrans. Harry camina sobre un banco adornado con estrellas judías, hacia las cerraduras laterales de los goblins codiciosos.pic.twitter.com/fZHMHf85h7
— Rafael Shimunov (@rafaelshimunov) 3 de enero de 2022
La escena a la que hace referencia a Jon Stewart fue compartida por mí en 2018, cuando Rowling difamaba a la izquierda como antisemitas y solo comenzaba a abrazar sus infames puntos de vista antitrans. Harry caminó sobre un banco adornado con judías, hacia las estrellas cerraduras de los duendes codiciosos.
Al mismo tiempo que tenemos represaliados, hay quien toma represalias. Si en el caso de los duendes es la comunidad mágica en general, mucho más crueles son los mortífagos. Ya sabéis, aquellos que no pueden permitir que una asquerosa sangre sucia como hermione granger campe a sus anchas por Hogwarts. Pero, ¿de dónde surge esa animadversión tan grande?
Antes de 1692, tanto las personas mágicas como las que no, convivían perfectamente entre ellas. La mezcla entre ellos era total, así que bien los muggles empezaron a perseguir a los magos y brujas en cacerías como las de Salem. Debido a ello, los seres mágicos se apartaron para vivir en secreto, crearon el Ministerio de Magia y permanecieron en un estado de emergencia perpetuo.

Tiene un campo de cultivo propicio para generar prejuicios entre personas, lo cual caló hondo en parte de la sociedad. Salazar Slytherin proclamó antes del año 1000 que los magos puros eran los únicos válidos y aquello era una tarea más que difícil de cumplir. Solo 28 familias fueron designadas con tal “honor”por lo que el resto de personas mágicas eran mestizas.
Este mantra biológico se convierte en una postura política que se utiliza para llevar contra los muggles. Tras la derrota en la Primera Guerra Mundial, la propaganda nazi señaló a los judíos alemanes como traidores y responsables de su fracaso, al mismo tiempo que los estigmatizó por atribuirles la responsabilidad de la depresión económica en el país una vez vez finalizando la Gran Guerra.
Uno de los tantos motivos que la historia ha dirigido su furibunda mirada hacia los judíos radica en que se les dijo como “los asesinos de jesuscristo“. Esta idea evolucionó en el siglo XIX hacia las diferencias raciales y el derramamiento de sangre, lo cual desembocó en horrores como los del Holocausto. A pesar de todo, Ron tiene claro en Harry Potter y la cámara secreta que “la mayoría de los magos en estos días son mestizos de todos modos. Si no nos hubiéramos casado con muggles, nos habríamos extinguido”.

El profesor Horace Slughorn, presente en Pociones durante Harry Potter y el misterio del príncipe, mostró como su idea había enraizado en él al considerar a Lily Potter como una “curiosidad” de la naturaleza. La madre de Harry fue nacida de muggles, lo cual chirriaba en el pensamiento de Slughorn, por lo que bien la consideraban su alumna más brillante.
¿Hay diferencias biológicas entre muggles y magos? Absolutamente ninguna y si se mantiene lo contrario es por un puro posicionamiento de clase. Los Weasley, una de las 28 familias puras, son denostados por los Malfoy con el único motivo de que ellos no dan la espalda a los muggles. El cabeza de familia, Arthur Weasley, desempeña en el departamento del Ministerio de Magia vinculado a los muggles, lo cual no le augura la plus de las reputaciones. en cambio, los Malfoy se siguen codeando con las elites del mundo mágico y con un Lucius que posee tanta influencia como para destituir a Dumbledore de su puesto como director.
Durante la Alemania nazi se extendió el pensamiento de que el pueblo alemán debía permanecer puro, impidiendo a los judíos, homosexuales, gitanos, discapacitados y diversos grupos. La toma de decisiones para que el objetivo de Hitler se llevase a cabo fue atroz, con esterilizaciones forzadas y asesinatos en masa. Durante el breve reinado de Voldemort, los registros de muggles, comparándolos con animales, fueron despojados de varitas y despedidos de sus puestos en el Ministerio. El que no debe ser nombrado no creó la doctrina que impartió, simplemente apeló una chispa que permaneció casi apagada en el interior de casi todo el mundo mágico. En las novelas por lo menos apareció Harry y compañía para ponerle freno.