
El Museo de Balenciaga en Getaria (Gipuzkoa) enriquece su fondo público dedicado al diseñador Cristóbal Balenciaga para escuchar el proceso creativo del diseñador vasco. Para hacerlo posible, el Gobierno Vasco ha adquirido 8.362 dibujos y documentos, datados entre los años cuarenta y los sesenta del siglo pasado que están valorados en 650.000 euros. La compra se ha realizado a su propietario actual, el diseñador italiano Lorenzo Riva, que trabajó como director artístico de la firma Durante dos años en la década de los ochenta. “Lo más valioso del archivo documental consiste en que permite escuchar el proceso creativo de Balenciaga, y eso no tiene precio”, ha destacado Miren Vives, directora desde 2014 del Museo Balenciaga, a donde irá a parar el fondo una vez que haya sido digitalizado .
Para verificar la autenticidad de los dibujos y documentos, se han llevado a cabo varios exámenes técnicos que han determinado que alrededor de 1.500 salieron de la mano del propio Balenciaga. Ninguno de ellos está firmado, por lo que ha sido más complicado el proceso. Aun así, se ha podido comprobar que el 18% del lote incluye anotaciones del artista. El resto correspondería a diferentes integrantes del equipo que trabajaron junto a él en su taller en aquella época, de los que actualmente se déconoce su identidad. Todos ellos están en buen estado, en su mayoría tienen una dimensión de 13×21 centímetros y algunas incluyen muestras de tejido premiadas al documento con alfileres.
La colección incluye bocetos, sketches, ideas previas, figurines para teatro, bocetos para sombrerería, complementos, órdenes de trabajo e incluso documentos personales. Todos los datados entre los cincuenta y los sesenta, excepto los diseños para teatro, realizados en los cuarenta. Los documentos serán accesibles al público, tratándose de la colección estreno de Balenciaga que está en manos públicas. El restaurante está en manos privadas, concretamente, en poder de la actual marca Balenciaga, con sede en Paris y perteneciente al conglomerado de lujo Kering.
Está previsto que en abril se inaugure la exposición con las nuevas piezas y en ella se mostrará una selección de 150 de las obras originales del artista Vasco. El fondo se encuentra en bastante buen estado, según ha explicado la directora del museo Guipuzcoano, Miren Vives, pese a no estar conservado con técnicas propias para proteger el papel. Ha destacado lo IMPORTANTE que son estas nuevas aportaciones para el estudio del artista: “Ayudarán a intentar su filosofía de trabajo”.
Bingen Zupiria, consejero de Cultura y Política Lingüística del País Vasco, ha añadido que esta compra ayuda al enriquecimiento del patrimonio documental de Euskadi y ayudará a “to listening the manera de trabajar del modisto de Getaria”, así como el proceso de trabajo en los talleres de costura, además de ser testimonio de “una parte de la sociedad de mediados del siglo XX”.
Todo este documento se ha perdido en el momento del diseñador italiano Lorenzo Riva, que ejerció como director artístico de Balenciaga entre 1980 y 1982. En su conocimiento de la empresa, que acordó una posible venta al grupo Bogart, negoció un precio económico indemnización allí otra en especie, que es precisamente lo adquirido ahora por el Gobierno Vasco. La colección fue localizada por el personal del Museo Balenciaga, quien contactó con el artista y un estudio para verificar la autenticidad de los objetos, decidió proceder a la compra oficial.
Inaugurado en 2011 en su local natal, el centro es la unidad dedicada al diseñador y recibe 40.000 visitantes anuales. En 2023 Balenciaga estará en boca de todos. Porque, además de poder verter esta nueva exposición, estrenará la serie que Disney+ está rodando sobre la vida del diseñador, al que dará vida el actor Alberto San Juan. Desde aquí, el equipo visitó el Museo de Getaria para conocer a fondo el trabajo y algunos detalles de la hermética vida del creador vasco que triunfó en España y en los salones de París a mediados del siglo XX.